EL CHALTÉN.- Son parte de las 65 familias que fueron seleccionadas para recibir un terreno pero la entrega definitiva está frenada por un amparo contra el municipio por la apertura de una calle en la reserva urbana La Lagunita, uno de los sectores donde están ubicadas las tierras en proceso de adjudicación. Ayer se manifestaron en el centro del pueblo para visibilizar su situación, mientras esperan que el juzgado Civil de El Calafate, a cargo de Jonatan Masters, que dictó la cautelar resuelva sobre el amparo.
Desde que en julio el municipio sacó a la luz la lista de 65 preadjudicatarios de tierras que habían sido cedidas por el Consejo Agrario, los beneficiarios esperan que se ejecute la entrega de los terrenos para poder asentar sus viviendas familiares y poner fin a una vida ambulante en situación de inestabilidad crónica.
El proceso de entrega de las tierras está trabado desde que en octubre vecinos presentaron un amparo contra el municipio por la apertura de una calle en la Reserva Urbana La Lagunita, uno de los sectores donde se asientan parte de los lotes, alegando los daños ambientales que se producirían en la zona afectada.
El juez Jonatan Máster dictó una cautelar, y ahora los preadjudicatarios esperan que resuelva la cuestión de fondo para saber si podrán tomar posesión de los terrenos.
De los 65 lotes, 27 están distribuidos en la zona baja e intermedia del pueblo, en tanto que los restantes 38 están ubicados en la zona alta, que son los que está judicializados.
Desde abril 20222 en El Chaltén rige la emergencia habitacional y social a raíz de la falta de tierras que hace que cientos de vecinos habiten en casas montadas sobre trineos o en casillas ubicadas en terrenos prestados o alquilados.
Vecinos "viejos" con casas montadas sobre trineos
Según un relevamiento realizado este año por el bloque de concejales de Encuentro vecinal, en el pueblo hay 204 casas trineo, y 199 casillas.
"Hay gente que se tiene que ir el mes que viene de sus casas, otros se tienen que ir dentro de dos meses, nosotros en marzo", contó a Winfo Santa Cruz, José, uno de los pobladores que espera desde hace más de diez años un lote para construir su vivienda, contó que "el único veterinario del pueblo tiene que abandonar su casa porque vendieron la propiedad", relata.
Cuenta que luego de tantos años, "somos vecinos viejos, la mayoría tenemos montadas nuestras casas sobre trineos", quedaron afuera del mercado inmobiliario, "hay terrenos a la venta que cuestan 300 mil dólares, inaccesibles para nosotros", se lamenta José.
Los preadjudicatarios buscan visibilizar su situación, "somos vecinos ´viejos´ decimos nosotros, que vivimos acá desde hace quince o veinte años, sorteamos todas las vicisitudes del pueblo, pasamos inviernos", evoca José.
Considera que el amparo trae una consecuencia indeseada, "nos pone a vecinos contra vecinos, en un entorno de emergencia habitacional, donde estamos imposibilitados de desarrollarnos económicamente y sobre todo, personalmente", explica José, quien opina que "el recurso de amparo nos enfrenta con nuestros vecinos, y nosotros no queremos enfrentarnos con nuestros vecinos", remarca.
El propósito de los vecinos movilizados "es visibilizar nuestra situación y así poder llegar al juez Jonatan Masters para que se expida sobre este recurso de amparo porque nosotros no tenemos los tiempos de la justicia, y estamos en una emergencia habitacional y no hemos podido comunicarnos con él por cuestiones de lejanía, pero esperamos que nos reciba y que le dé una pronta solución al tema", concluye.