EL CALAFATE.- "Es divertido manejarlo" comenta Bernd con el rostro pleno de felicidad como el de un niño que estrena su juguete preferido, mientras conduce el "Tita", un vehículo eléctrico y flamante adquisición de panadería Pantagonia para repartir sus productos entre los clientes locales. En su caso la satisfacción es doble, ya que la energía que abastece la camioneta es generada en una estación local que construyó junto a su socio en una firma dedicada al campo de las energías renovables.

Viernes 10 de la mañana, día soleado y sin viento en la villa turística, un día de tantos para los locales y una jornada prometedora para los turistas que disfrutan de uno de los destinos más atractivos de la Patagonia Argentina. Para Bernd Ferstl también es un día especial, aunque por otros motivos: después de tres años de planificar el proyecto a partir de ahora podrá repartir los productos de su panadería a bordo de un vehículo sustentable impulsado con energía solar.

"Acá tenemos todos los recursos para generar energía limpia, tenemos sol, viento, ríos, solo falta tomar conciencia de que debemos dejar de usar combustibles fósiles", afirma este emprendedor que junto a su esposa Bonny Bollmann montó una panadería en EL Calafate cuyos exquisitos productos elaboran ellos mismos en su fábrica.

El simpático vehículo bautizado con nombre de mujer por lo fabricantes con sede en San Luis, es una camioneta a la que luego le adaptaron una caja para transformarla en un utilitario.

De este modo PANtagonia cierra el círculo de un proyecto de sustentabilidad que el grupo Winding del que Bernd es socio propietario, inició en 2020 con la construcción de una estación solar que provee de energía renovable a productos propios y también brinda servicios a terceros.

Con la incorporación del Tita, PANtagonia se transformó en el primer comercio de la provincia que realiza que distribuye sus productos con un vehículo sustentable.

"Tiene una autonomía de 300km con una carga completa, por lo que estimamos que la batería podría durar una semana", explica Bernd. En cuanto al aspecto económico y el impacto que tendría la incorporación de un vehículo eléctrico a su unidad de negocio, afirma que es una variable que se medirá en el tiempo, aunque el hecho de que la energía la generen en una planta propia abarata los costos.

Respecto a cuáles serían las diferencias que advierte respecto del vehículo convencional que utilizaba hasta ahora, "es un poco menos espacioso en la caja del conductor, pero la caja donde cargamos la mercadería es más grande, caben más cosas", detalla Bernd.

Aprecia el andar silencioso del vehículo aunque no recomienda transitar por el ripio, "a una escala local donde uno tiene un reparto que hacer éste es un vehículo perfecto", asegura.

De todos modos insiste en que la mayor fortaleza del vehículo es que no contamina, y sobre todo que contribuye a generar conciencia, "tenemos que transformar nuestros hábitos, sobre todo por nuestra responsabilidad hacia el cambio climático", remarca, Bernd, convencido de que a partir de este día de bautismo de Tita, con su accionar y el de su empresa familiar el planeta está un poco menos contaminado.

El Tita, en su versión original con Bonny al volante.
Con la caja adaptada para trasladar la mercadería