SANTA CRUZ.- La gobernadora Alicia Kirchner puso en funciones a la flamante ministra de Desarrollo Social, María Belén García, quien afirmó que continuará la tarea que se venía realizando en el área. En el mismo acto oficial también asumió Karina Saul, como presidenta de Distrigas S.A., y Marina Basalo como subsecretaria de Agenda Pública. No estuvo presente en el acto, el renunciante, Jorge Ferreyra, y sí asistió el exgobernador Héctor Marcelino García, padre de la flamante funcionaria y de la diputada Rocío García, también presente en el acto.
María Belén García expresó que sus expectativas “son muchas, con algo de nervios que calculo que el día que los deje de tener es cuando hay que dar un paso al costado”, afirmó la flamante funcionaria quien agradeció a la gobernadora "que confía una vez más, no solamente en mi persona sino en el equipo de trabajo que venimos hace mucho tiempo trabajando por la provincia y en el gabinete de ella”, agregó.
Destacó que “la articulación siempre estuvo, porque si hay algo que pide la gobernadora es que tengamos articulación con todos los ministerios; no es lo mismo desde dentro, pero conocemos acabadamente al recurso humano valioso con el que cuenta Alicia, un montón de compañeros y compañeras comprometidos y comprometidas”.
No estuvo presente en el acto, el renunciante, Jorge Ferreyra, y sí asistió el exgobernador Héctor Marcelino García, padre de la flamante funcionaria y de la diputada Rocío García, también presente en el acto.
Belén García reiteró que “la expectativa es muy alta, para seguir trabajando de la misma manera que se viene haciendo, y profundizando; creo que en cada lugar en el que nos toca asumir es para profundizar, nunca es para arrancar nada de base porque se viene trabajando y mucho”.
La foto.
No estuvo presente en el acto, el renunciante, Jorge Ferreyra, y sí asistió el exgobernador Héctor Marcelino García, padre de la flamante funcionaria y de la diputada Rocío García, también presente en el acto.
"Chicho" García fue el gobernador interino que en 1991 en medio de la crisis provocada por el juicio político a Ricardo Del Val y la posterior renuncia de José Ramón Granero.
Contó con el apoyo de Néstor Kirchner, sin embargo, cuando recibió la provincia de manos de García dijo que le había entregado "una provincia en llamas" y quebrada.