LAGO POSADAS.- El próximo domingo 11 de febrero, el Papa Francisco consagrará a Mama Antula como la primera Santa Argentina. Tras cientos de pasos previos y al comprobar su poder de intercesión para lograr los milagros, se puso fecha a la canonización.

Una de las muestras del poder de la fe se manifestó en la recuperación de Claudio Perusini, un docente jubilado de Río Gallegos que el 25 de julio de 2017 sufrió un ACV durante una visita su Santa Fe natal . Pero fue mucho más que eso, ya que su diagnóstico dio cuenta de un ictus isquémico con infarto hemorrágico en varias zonas, coma profundo, sepsis y shock séptico resistente con fallo multiorgánico.

No tenía posibilidades, sólo le habían dado unas horas de vida.
Con ese panorama, Ernesto Giobando, hoy Obispo de Mar del Plata, viajó desde Buenos Aires a verlo; fue él quien le pidió a Mama Antula por la salud de su amigo, también lo hicieron familiares y todo su entorno.

Claudio estuvo hasta el mes de agosto sin poder ver, sin moverse, sin hablar. Estaba en estado vegetativo hasta que ‘milagrosamente’ comenzó a despertar y a reaccionar. La explicación científica a su recuperación nunca llegó. La medicina no tiene una respuesta al renacer de Claudio, pero la fe, sí.

Es testimonio viviente y palpable de uno de los milagros de Mama Antula y por ello será uno de los invitados especiales a la ceremonia de santificación que encabezará el Papa Francisco en el Vaticano.

Antes de su partida a Roma lo visitamos en su casa de Lago Posadas, en el noroeste santacruceño, donde actualmente vive junto a su familia.
Verlo y escucharlo a Claudio Perusini,"el hombre del milagro", es una invitación a la esperanza, a la fe y a la vida.

Informe: Karina Taberne y Claudio Lobos.