RIO GALLEGOS.- Por falta de profesionales hoy quedó cerrada el Área Roja del Hospital Regional de Río Gallegos, lo que se considera la primera línea en la atención de pacientes que llegan con alguna dificultad respiratoria sea positivo a COVID-19 o no. El sector que durante estos meses estuvo atendiendo entre 100 y 120 pacientes por día con escaso personal, quedó cerrado desde la madrugada hasta el lunes, y quienes lleguen al Hospital, sin distinción están siendo atendidos por la Guardia Central.
Según pudo reconstruir Winfo Santa Cruz a partir de múltiples fuentes el Area Roja quedó cerrada a las 2 de la madrugada del sábado por falta de profesionales necesarios para funcionar durante las 24 horas como lo requiere este servicio vital para la atención primaria y clave para detectar posibles pacientes con COVID-19. En el Hospital Regional hay alarma por la decisión de cerrarlo ya que el área era una medida acertada para evitar propagar el virus.
La confirmación del cierre llega en uno de los peores días desde el rebrote de julio, donde al mediodía de hoy se informaron 4 fallecidos y elevó así a 91 el numero de pacientes muertos por COVID-19 en la provincia. Todos los decesos se dieron a partir del 24 de julio en adelante, cuando la pandemia se recrudeció en Santa Cruz.
¿Porqué es importante el área roja?
El área roja empezó a funcionar en junio la idea era poder separar todos los pacientes positivos o sospechosos con el resto de los que acuden a la guardia del Hospital Regional, cuenta con 7 consultorios que es para atención y cuatro camas de observaciones. Dentro de eso hay un consultorio para pediatría.
La función del área roja es recibir al paciente con alguna dificultad respiratoria sea positivo o no. Una vez que ingresa, el paciente es evaluado y si es positivo lo derivan a una de las cuatro camas con que cuenta el área. Allí se hace la evaluación, y el tratamiento inicial. Si llega descompensado, -que es lo que esta pasando últimamente- se lo compensa y se decide si es derivado a a Clínica Covid, Terapia Intermedia o a la Unidad de Terapia Intensiva, que según los datos de hoy estaban en un 83% de su capacidad.
Antes del rebrote de julio la actividad era baja en el sector no superaba a los 10 pacientes por días, con el correr de los días y el aumento de los contagios la cantidad de pacientes fue creciendo hasta llegar a 120 por día que pasan por el sector. De esa cantidad, el 10% aproximadamente necesita internación.
El área que cuenta solo con tres médicos y ocho enfermeros, también tiene a su cargo la evaluación de los pacientes dados de alta por COVID-19 pero que siguen bajo evaluación por ser añosos, o porque tienen otras patologías que requieren control. En tanto que también se controla a los pacientes COVID-19 positivos con algún problema respiratorio pero que no es necesaria la internación y se los trata de forma ambulatoria.
El área roja es la primera línea en el hospital que enfrenta la enfermedad, es donde definen si es o no positivo un paciente, si es necesario estabilizarlo y definen como sigue el tratamiento.
Con el correr de los días, la situación empezó a tornarse humanamente imposible para el reducido grupo de médicos y enfermeros. Si bien recibieron algunos de los médicos que vinieron de paso, no se quedaban el tiempo suficiente como para aliviar al sector, en la semana que se quedan apenas les alcanza para adaptarse al servicio. Los profesionales cumplen guardias de 12 horas x 12 horas.
El Area Roja hoy corre el peligro que la cierren definitivamente por falta de personal. El cierre por ahora es solo del fin de semana, y todos los pacientes que lleguen con problemas respiratorios o no, que puedan ser casos positivos a COVID-19 o no, tendrán que ir a la Guardia Central.
"Nadie puede administrar salud sin plata. se necesita para los insumos para contratar personal medico y de enfermería y se necesita tener en claro cuales van a ser las prioridades y debe ser el COVID", detalla una de las fuentes consultadas para esta nota. El futuro del Area Roja del hospital por ahora pende de un hilo.