SANTA CRUZ.- Las afirmaciones del secretario de Hacienda Municipal, Diego Robles, cuando sostuvo que las cifras del 14.5% de aumento ofrecido a los municipales eran "números incluso superiores a los acordados por la Provincia para los trabajadores de la ex 591", pusieron luz sobre una realidad incostratable: los salarios de los estatales provinciales sufrieron un marcado deterioro en su poder adquisitivo durante la gestión de la gobernadora, Alicia Kirchner.

Según Diego Robles, el incremento ofrecido a los municipales arroja cifras que van desde los 5.700 pesos para la categoría 10, la más baja, hasta los 8.000 pesos para la categoría 24, la más alta del escalafón municipal.

Si bien es cierto que "en números" el incremento ofrecido a municipales es superior al que pactó el gobierno con los estatales, a esa fórmula Robles llega aplicando un porcentual de aumento menor (14.5) al que dio la provincia (20%) sobre una base salarial municipal que es mayor a la de los deprimidos sueldos de los empleados públicos provinciales.

El resultado en la práctica, es que por primera vez en los últimos 5 años,los municipales recibieron una oferta de incremento de sueldos, menor a los de la provincia.

Para respaldar sus dichos el funcionario acercó a la mesa de negociaciones con el SOEM una planilla comparativa entre los salarios que percibe hoy un empleado de la ex 591 (ATE-APAP-UPCN), con los que percibiría un Municipal con la nueva pauta salarial.

Chicanas aparte, de las que suelen dominar toda negociación salarial, y del pase ilusionista para convencer a los gremialistas de que 14.5 es menor a 20, el porcentaje genérico pautado por el gobierno provincial, lo cierto es que Robles tiene razón en un punto: hoy un empleado provincial de la misma categoría y función que un municipal, percible por lo menos un 50% menos de sueldo.

Año por año las mejoras en el sueldo de los municipales duplicaron a los que pactaron los gremios estatales con Alicia Kirchner.

En 2016 los municipales acordaron con el Ejecutivo el pago de  incrementos cercanos al 40 por ciento, dado que a los aumentos pactados ese año, se les sumó un acta acuerdo de 2015 de las gestiones de Raúl Cantín y Pablo Grasso que establecía un 15 % que los jefes comunales habían incumplido, y que el entonces intendente Roberto Giúbetich decidió abonar.

Los estatales provinciales ese año percibieron un aumento en un rago de entre el 27 y el 30 por ciento.

Mientras que en 2017 los trabajadores estatales provinciales no recibieron un solo peso de incremento salarial, el 02 de junio de ese año el SOEM pactó con el municipio un 18% acumultaivo a pagarse en tres cuotas, más la aplicación de la «cláusula gatillo» y un incremento en el adicional por antigüedad. El acuerdo posibilitó el levantamiento de las medidas de fuerza del gremio.

En julio de 2018 y tras 70 días de medidas de fuerza el SOEM firmó un 23 % de incremento en el sueldo más 1 punt por año de antiguedad.

En mayo de 2019 el incremento acordado en la paritaria municipal fue del 31,66%, y se abonó 15% en mayo, 7% en julio y 7% en septiembre.  En tanto, el Ejecutivo se comprometió además de volver a discutir el tema salarial en el mes de agosto.

En marzo de 2019, los trabajadores municipales de Río Gallegos obtuvieron una mejora en el pago de Asignaciones Familiares a partir de la equiparación de los montos con los que paga el ANSeS, con el índice 4 correspondiente a la Patagonia. Pasaron a abonarse el doble de lo que percibe un empleado estatal provincial (Mirá los montos).