En el año 2012 la periodista Janina Ramos y un grupo de amigos, impulsados por su amor a los animales, decidieron crear Patitas de la Cuenca, para intentar contener a los perros en situación de calle de la ciudad y también para tener un mejor pueblo para todos. Ellos fueron los primeros en reaccionar el fin de semana pasado cuando estalló la matanza de perros en Río Turbio. Ayer convocaron a una marcha de silencio y se presentaron ante la justicia para aportar información y pruebas.

Tras la macha, Janina escribió estas palabras en sus redes sociales donde cuenta porqué marcharon, que piden y cuales es su compromiso con la causa.

Ph de portada:

*Por Janina Ramos

Desde el 2012 he aprendido muchas cosas, ese fue el año que arrancamos con Patitas de la Cuenca, en la foto ven a algunos de mis compañeros y amigos que he conocido estos años, me siento orgullosa porque se han puesto la camiseta de la solidaridad, a ellos los conocí en la calle, ayudando.
En este último tiempo y ya cerca de los 40 años no tolero el bardeo gratuito, no es bueno para la salud y menos el que está detrás de un teclado. Hubo gente q nunca me preguntó siquiera que hacíamos y directamente nos juzgó. De eso ya no más.

Gracias a Dios son más los que dejan la comodidad de su casa y ayudan... hoy en la marcha vi a niños con carteles pidiendo que aparezcan los culpables de los que jugaron con la salud de todos. Varios con lágrimas en los ojos nos contaron cómo perdieron adentro de sus patios a su mascota.

El sábado 25 de agosto salieron a tirar carne envenenada por mi pueblo, lugar donde nací y donde elijo vivir. Vi como mi vecino de al lado de mi casa le daba agua con sal para que sus perritas vomiten el veneno, otro de mis vecinos me pidió que lo acompañara a ver la carne envenenada que dejaron en frente del Hospital, al de la otra esquina le tocó correr al consultorio veterinario a las 3 de la madrugada.

A vos te parece que esta bien que haya pasado porque hay muchos perros, otros te dicen sueltos de cuerpo que hay que matar a todos... otros te mandan posteos de lo que la gente va hacer con los perros sueltos etc. Nada de esto contribuye, o suma. Se que hay mucho por hacer, no hay nada que inventar nos falta imitar programas de control canino y felino que funcionan en nuestro país hace ya años. 

Por otro lado, te quiero aclarar que nosotros no queremos perros en la vía publica, no defendemos aquellos que muerden, jamás hemos ido a prepotear a nadie ni hemos ido a quejarnos a la muni por la famosa perrera. Te mintieron para que odies el trabajo que ellos no han podido hacer en tantos años. 

Ruego primero por un Municipio amigo, del que haga partícipe a su vecino, hay muy buenas ideas y ganas ...muchas ganas de mejorar el lugar donde vivimos porque amamos quizás nuestro lugar más que la gente que nos representa. Porque no nos mueve la plata, ni un cargo. Nos mueve el piso nuestros hijos, al menos es mi caso. 

Tengo la tarea/responsabilidad de enseñar a mi hijito que si voy adoptar a un animal, lo debo cuidar y hacerme cargo de el, que nuestros bosques no se venden y que por eso hay que defenderlos. Que si hay que marchar porque la motivación es buena y beneficiosa para todos hay que estar.
No quiero que salga de mi boca, con cara de odio " hay que matar a todos", no quiero enseñar a mi hijo que hay que criticar todo y quedarse calentito atrás de un teclado.

Siempre que pueda dentro de mis posibilidades ahí estaré ayudando... ahí estaremos ayudando con mi peque. Ha sido en lo particular un camino al principio de muchas lágrimas, porque el mejor amigo del hombre ha sido abandonado, asesinado de la peor manera, me ha tocado como a muchos de mis amigos, curarlos de la sarna, a varios los hemos ayudado cuando fueron atropellados... y otras cosas más. 

Ellos me han hecho compañía en los días más tristes, tengo en las retinas de los ojos cuando estaba embarazada de 3 meses y vomitaba arrodillada en el inodoro, al lado mío estaba el Tipy, un perro que vivía en la calle y hoy vive con una flia... el me miraba con amor.

Por eso amigos, esto lo solucionamos entre todos, cuando adoptemos hagámoslo con responsabilidad, mi perro en mi patio, mi perro/a castrado/a mi perro parte de mi familia, sale conmigo y con nadie más. Eso enseñemos a los que podamos.

Lo que pasó este fin de semana no se trata de unos perritos que murieron se trata de que este estanciero pensó que Río Turbio era su estancia. Este veneno comprometió el hábitat de las aves y de un gran ejemplar que contemplamos como el cóndor... nuestro ecosistema, comprometió la salud y la vida de lo más preciado que tenemos varios de los que leen. Nuestros hijos.

Río Turbio es mi casa y la de mi hijo. Yo le digo al que pensó que éramos su estancia que acá es persona no grata, que nosotros no somos sus ovejas. Y quiero que paguen porque jugó con la salud de todos!