LA NACIÓN/Mariela Arias.-

EL CALAFATE.-José Carambia y Natalia Gadano le podrían dar al Gobierno los apoyos decisivos para avanzar con el proyecto; pero la provincia reclama el traspaso de las áreas petroleras de YPF, la no privatización de YCRT y la revitalización de las represas.

El traspaso de YPF a Santa Cruz de las áreas petroleras, la privatización de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) y la urgente continuidad de las represas hidroeléctricas son los tres puntos que hoy están trabando el voto positivo de la Ley Bases de los senadores santacruceños José Carambia y Natalia Gadano. Lo que se defina en las próximas horas entre el gobernador Claudio Vidal, al frente de las negociaciones, y la Casa Rosada, será decisivo para el futuro del paquete de medidas que desvela al gobierno de Javier Milei.

Los libertarios deberán reunir un mínimo de 37 legisladores para la sesión de mañana, necesarios para iniciar el debate y aprobar las iniciativas y de acuerdo al último conteo por ahora solo tienen aseguradas 35 voluntades, a los indecisos Carambia y Gadano se suma el radical Maximiliano Abad. Santa Cruz puso en la mesa tres temas estratégicos vinculados a la producción energética en la provincia.

A finales de mayo Carambia y Gadano celebraron la incorporación del aumento de regalías mineras de 3% a 5% durante en el dictamen del proyecto de la Ley Bases en su paso por las comisiones del Senado, lo cual se hizo a pedido de Carambia, destacaron la apertura del diálogo del gobierno nacional y se mostraron cercanos a acompañar la votación, aunque advirtieron que no acompañarían la restitución del impuesto a las ganancias ni la reforma laboral.

Sin embargo, con el correr de los días, el cambio en el impuesto minero, no alcanzó para conformar los requerimientos del gobierno de Vidal, cuyo bajo paraguas político, Gadano del PRO y Carambia con el partido vecinalista MOVER, llegaron a la Cámara Alta. A horas de las definiciones quedó claro que hacía falta mucho más que la reforma minera para acompañar la Ley Bases: desde la gobernación santacruceña confirmaron que las negociaciones están abiertas pero es necesario definiciones más precisas sobre el futuro de las actividades petrolera, carbonífera y la continuidad de las represas hidroeléctricas.

Senadores Natalia Gadano y José Carambia junto a Alicia Kirchner el día de la jura en los cargos.

Punto por punto

En los últimos días versiones de despidos y retiros voluntarios de la empresa publica YCRT sumó inquietud y tensión a esta negociación entre la provincia y la Nación. Durante el paso por la Cámara Baja, la empresa quedó dentro del paquete de las que se iban a privatizar, pero se incluyó la variable que la privatización sería solo de manera parcial. “El Gobierno nacional la quería privatizar totalmente, nosotros logramos que sea solo de modo parcial, en un esquema similar al de YPF”, explicó una alta fuente del gobierno santacruceño.

Sin embargo ahora requieren que haya más precisiones de la privatización parcial, que el estado provincial retenga la mayoría accionaria, se establezca un esquema de propiedad participada. “Queremos que nos aseguren el modelo YPF, pero trasladado a YCRT”, aseguran desde Santa Cruz.

En tanto que en materia petrolera, desde enero Vidal lleva adelante la negociación del retiro de YPF de la explotación de los yacimientos convencionales en Santa Cruz, que según un comunicado de la provincia será el próximo 1 de septiembre. Por estos días se negocia los términos de ese retiro, según confirmaron fuentes de la gobernación santacruceña, que por ahora se encuentra en discusión la letra final. ¿Qué lo traba? La provincia quiere ser quien controle los llamados a licitación.

Si bien desde la petrolera estatal ya se avanzó en la reversión de las áreas, y encomendó al Banco Santander el proceso de venta de 55 áreas de explotación de petróleo y gas “convencional”, en lo que llamó el “Proyecto Andes”, Santa Cruz no acepta que la licitación la realice YPF, sino que reclama que el proceso licitatorio está a cargo de la provincia, a través de los mecanismos que considere pertinente y en este caso se diferenció del resto de sus pares patagónicos. Y ese es uno de los puntos que traba la negociación.

El tercer punto y quizás el más difícil de resolver en el corto plazo, es la reactivación de la obra de las represas “Néstor Kirchner” y “Jorge Cepernic” , paralizadas desde diciembre, el megaproyecto impulsado por el kirchnerismo en la década pasada. Hoy hay 1800 personas despedidas, y la promesa de una reincorporación, tras la posible reactivación.

La continuidad del emprendimiento depende del éxito de las gestiones del gobierno argentino con China para que se avance en la firma de la Adenda XII del contrato que permitiría el desembolso de los fondos para seguir con la obra. De reactivarse después del receso invernal, se garantizaría la continuidad de cientos de puestos de trabajo.

La Ley Bases está poniendo a prueba la relación entre el gobernador y los dos senadores santacruceños, que si bien llegaron por la coalición política “Por Santa Cruz” liderada por Vidal, no pertenecen al riñón político del petrolero. Sin embargo, según pudo confirmar este medio, por estas horas, hay una excelente sintonía entre Vidal y los senadores y están siguiendo de cerca el resultado de las negociaciones, que hasta hoy, tienen final abierto.

El senador Carambia fue intendente por dos períodos de la localidad petrolera de Las Heras, donde fundó el partido Movimiento Vecinal Renovador, Mo.ve.re., y en el cargo lo sucedió su hermano, Antonio de buen vínculo con Vidal. Desde su partido promovió en Santa Cruz la precandidatura presidencial del entonces jefe de Gobierno, de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, lo cual deja en claro su cercanía con un sector del Pro. En tanto que la senadora Gadano, también identificada con el Pro, fue dentro de la coalición “Por Santa Cruz”.-

Fuente: La Nación-Corresponsal en Santa Cruz.-