SANTA CRUZ.- La información la dio a conocer hoy la UTE Represas Patagonia. Afirma que se trata de una situación "momentánea" y promete que una vez que el estado nacional culmine con la gestión de los créditos y reanude el reembolso de fondos, "se podrá comenzar a recuperar los puestos de trabajo, sumar nuevos". No dio detalles de la cantidad de personal ni las condiciones en las que fueron dados de baja de sus puestos de trabajo.
A través de un comunicado la UTE Represas Patagonia (Gezhouba, Eling Energía e Hidrocuyo) informó que "Se prescinde momentáneamente de parte del personal vinculado al proyecto. Mantendremos una dotación en las obras con mínima actividad para garantizar su continuidad".
Hace unos días el gobernador, Claudio Vidal, se manifestó de acuerdo con la continuidad de la obra: "se tiene que terminar, China está muy interesada en terminar la obra y hoy es una decisión netamente del Gobierno Nacional. Calculo yo que, en los próximos días si no hay respuestas, tendremos que hablar directamente con el Ministerio de Trabajo de la Nación también para que tome cartas en el asunto”, expresó el mandatario.
Confirma que junto al Comitente Energía Argentina S.A. (ENARSA) y la Contratista UTE ) se encuentran "abocados al tratamiento y resolución de temas contractuales pendientes (precedentes a las nuevas autoridades de ENARSA) para la continuidad de las obras de construcción de las represas sobre el río Santa Cruz".
Las causas alegadas por la UTE para prescindir del personal
Manifiesta que "la resolución de los procesos contractuales pendientes, junto al nuevo programa de ejecución de obra viable -ya elaborado en conjunto con el comitente-, permitirá continuar con la planificación exhaustiva de las actividades en obra".
Desde noviembre del 2023 se pausaron las actividades principales de obra por la falta de fondos destinados a la construcción de las obras, "incluso a pesar de los continuos aportes extraordinarios otorgados por la UTE, especialmente de la casa matriz de China Gezohuba Group Company Limited", señala el parte de prensa.
Alega que esta situación "excede a la UTE", por lo que lamenta informar que "Se prescinde momentáneamente de parte del personal vinculado al proyecto. Mantendremos una dotación en las obras con mínima actividad para garantizar su continuidad", afirma.
Informa además que "el Estado Nacional está cumplimentando las condiciones subsecuentes de la enmienda del crédito necesarias para la continuidad de los desembolsos".
La UTE no dio detalles de la cantidad de personal ni las condiciones en las que fueron dados de baja de sus puestos de trabajo, ni si, por ejemplo percibirán algún tipo de indemnización. En la obra se desempeñan más de 2500 obreros.
La UTE promete que una vez resueltas las condiciones financieras y el plan de obra "se podrá comenzar a recuperar los puestos de trabajo, sumar nuevos y aumentar las actividades, acorde al programa de trabajo consensuado por las partes. Las proyecciones nos indican que para los próximos años habremos creado miles de nuevos puestos de trabajo en el proyecto hasta su finalización.
Por último remarcan que continúan trabajando con ENARSA y en comunicación con los gremios que agrupan a los trabajadores, "para resolver las dificultades, y recuperar de forma paulatina el ritmo de las actividades. Entre todos vamos a alcanzar el objetivo común de concretar una obra tan importante para el futuro energético del país", finaliza el comunicado.