SANTA CRUZ.- Un empleado de las represas fue salvajemente agredido por un grupo de encapuchados que lo atacó mientras el operario se encontraba en su habitación en el campamento de la represa Jorge Cepernic. Como resultado de la agresión, la víctima resultó con golpes y cortes en el rostro y otras partes del cuerpo. Fue internado en el hospital de Piedra Buena. Atribuyen el hecho a una disputa interna del gremio UOCRA. 

 Un hecho de violencia con características mafiosas tuvo lugar el domingo en el campamento de la represa Jorge Cepernic, cuando cuatro personas encapuchadas golpearon brutalmente a Alejandro Gustavo González, mientras éste se hallaba en su habitación.

González fue agredido con la utilización de palos y hierros y mediante la utilización de un machete, con el que también le cortaron el pelo, amenazándolo de muerte con un cuchillo y advirtiéndole que si no la cortaba le iban a cortar la mano, según los testimonios de personas que trabajan en las represas y que prefirieron preservar su identidad.

A raíz de los golpes y cortes en el rostro y diferentes partes del cuerpo la víctima debió ser internada en el hospital de Piedra Buena con pronóstico reservado.

Según el examen médico, González de 47 años, presentaba politraumatismo en región costal y facial y fractura de nariz e inflamación de rostro y cuerpo.

Las mismas fuentes consultadas por este portal aseguraron que se trataría de una interna gremial entre representantes de la UOCRA, uno de los sindicatos que actúa en el ámbito de las represas.

A pesar de que ya transcurrieron más de tres días desde que ocurrió la golpiza, los agresores aún no fueron identificados, y se desconoce si se tomaron testimonios a testigos. Se presume que los agresores también son empleados de Represas Patagonia, pero hasta el momento la firma no dio detalles del incidente. 

Gonzalez es oriundo de Bahía Blanca y tiene afinidad con Rubén Pronotti, secretario adjunto de UOCRA, cuyo gremio conduce desde 1990 el Secretario General, Gerardo Martinez.