opinion.Flores y bombones, no bastan para acabar con las injusticias
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Por Gaby Mestelán
Ratificamos nuestra lucha contra la feminización de la pobreza y nuestro compromiso por la feminización de las relaciones, esto es: impregnar de humanidad nuestro tiempo y nuestro mundo devastado.
Luchamos contra la feminización de la pobreza que tiene los rostros de cada mujer que, día a día, lucha la vida de pie, con entereza y enorme dignidad en nuestra ciudad, en nuestra Provincia.
Mujeres sostén de hogar, mujeres que padecen la precarización laboral o el trabajo en negro, mujeres que no logran acceder a un trabajo digno.
Mujeres que asumen la maternidad sola, madres adolescentes tan niñas como sus criaturas! Mujeres maltratadas, mujeres víctimas de violencia doméstica y de violentaciones institucionales.
Mujeres discriminadas: por su origen social, procedencia, aspecto físico, orientación sexual, creencias religiosas. Mujeres migrantes que afrontan el desarraigo y enfrentan el prejuicio social y estatal. Mujeres esclavizadas en las redes de trata y tráfico de personas. Mujeres enfermas por no alcanzar el esteriotipo de mujer propuesto por la cultura imperante.
Mujeres todas, víctimas de un sistema machista y patriarcal que sigue profundizando las desigualdades y que cuida, cada 8 de marzo, adornar la desigualdad con premios , flores, y bombones, que no están mal, pero, son irrelevantes ya que no cambian en un ápice las realidades de injusticia que siguen convalidando.
Hoy debiera ser un día de reconocimiento y gratitud, de reflexión y compromiso.
Reconocimiento a la convicción de tantas mujeres, cuyas vidas dieron paso a la lucha por igualdad en la historia.
Gratitud por la vida de tantas mujeres cercanas, que atraviesan nuestras historias personales, que nos enseñaron y enseñan caminos de libertad y horizontes de humanidad irrenunciables.
Reflexión honesta y profunda respecto a la justicia de género en el aquí y el ahora de nuestra sociedad.
Compromiso con la lucha por el cumplimiento real de las conquistas alcanzadas y por el logro definitivo de los derechos que faltan alcanzar.
Vaya entonces nuestro reconocimiento, gratitud, reflexión y compromiso.
* La autora es docente y diputada provincial por Encuentro Ciudadano
Por Gaby Mestelán
Ratificamos nuestra lucha contra la feminización de la pobreza y nuestro compromiso por la feminización de las relaciones, esto es: impregnar de humanidad nuestro tiempo y nuestro mundo devastado.
Luchamos contra la feminización de la pobreza que tiene los rostros de cada mujer que, día a día, lucha la vida de pie, con entereza y enorme dignidad en nuestra ciudad, en nuestra Provincia.
Mujeres sostén de hogar, mujeres que padecen la precarización laboral o el trabajo en negro, mujeres que no logran acceder a un trabajo digno.
Mujeres que asumen la maternidad sola, madres adolescentes tan niñas como sus criaturas! Mujeres maltratadas, mujeres víctimas de violencia doméstica y de violentaciones institucionales.
Mujeres discriminadas: por su origen social, procedencia, aspecto físico, orientación sexual, creencias religiosas. Mujeres migrantes que afrontan el desarraigo y enfrentan el prejuicio social y estatal. Mujeres esclavizadas en las redes de trata y tráfico de personas. Mujeres enfermas por no alcanzar el esteriotipo de mujer propuesto por la cultura imperante.
Mujeres todas, víctimas de un sistema machista y patriarcal que sigue profundizando las desigualdades y que cuida, cada 8 de marzo, adornar la desigualdad con premios , flores, y bombones, que no están mal, pero, son irrelevantes ya que no cambian en un ápice las realidades de injusticia que siguen convalidando.
Hoy debiera ser un día de reconocimiento y gratitud, de reflexión y compromiso.
Reconocimiento a la convicción de tantas mujeres, cuyas vidas dieron paso a la lucha por igualdad en la historia.
Gratitud por la vida de tantas mujeres cercanas, que atraviesan nuestras historias personales, que nos enseñaron y enseñan caminos de libertad y horizontes de humanidad irrenunciables.
Reflexión honesta y profunda respecto a la justicia de género en el aquí y el ahora de nuestra sociedad.
Compromiso con la lucha por el cumplimiento real de las conquistas alcanzadas y por el logro definitivo de los derechos que faltan alcanzar.
Vaya entonces nuestro reconocimiento, gratitud, reflexión y compromiso.
* La autora es docente y diputada provincial por Encuentro Ciudadano