RÍO GALLEGOS.- Fue detenido en el estacionamiento del Juzgado de Faltas, con una valija en el interior del baúl de su auto. El hombre tenía antecedentes de condenas. (Imagen ilustrativa).

La reiterancia delictiva del hombre, que tiene condenas previas y actualmente es investigado por otro delito en la justicia provincial, fue uno de los elementos expuestos por la fiscalía para justificar la medida de coerción.

El Ministerio Público Fiscal formalizó ayer la investigación penal contra un hombre de 34 años por el delito de tenencia con fines de comercialización de estupefacientes. La audiencia de formalización de la investigación y control de detención se realizó ante el juez federal de garantías Claudio Vázquez y estuvo a cargo del fiscal federal Julio Zárate, responsable de la Unidad Fiscal de Río Gallegos, con la participación de la secretaria Virginia Haggi.

De acuerdo con lo expuesto por el MPF, el proceso se inició el miércoles pasado, tras una llamada de un oficial de la División de Investigaciones de la Policía de Santa Cruz donde expuso que estaba realizando tareas de investigación sobre el hombre por un robo calificado. En ese marco, habría observado el auto del imputado en el estacionamiento del Juzgado Municipal de Faltas, por lo que procedió a demorarlo.

Tras la autorización judicial, se realizó una requisa al vehículo donde se halló, en una valija dentro del baúl, una sustancia blanca que resultó ser clorhidrato de cocaína. Al secuestrarla, se estableció que se trataba de 311 gramos de esa sustancia estupefaciente. Además, se halló una balanza de precisión.

Al trasladarlo a la comisaría 7ma. de la ciudad, el hombre pidió ir al baño, momento en el cual intentó deshacerse de una bolsa que contenía dos envoltorios con 11 gramos de marihuana en total. Además, intentó esconder otro paquete detrás del lavamanos, que contenía otros 11 gramos. Luego, se descubrió que había descartado otros 7 gramos de cannabis en una de las salas del lugar.

En la audiencia, los representantes del MPF solicitaron una serie de medidas para avanzar con la investigación, además de la prisión preventiva del imputado. En ese sentido, se resaltó que fue condenado en dos oportunidades: una en 2020 por robo calificado por el uso de arma de fuego y otra en 2022 por la tenencia con fines de comercialización, además de la causa que tiene abierta y que originó este caso.

A todo ello, la fiscalía agregó que había mentido cuando dio su domicilio y resaltó la gravedad del intento de descarte del material estupefaciente.

Ante esto, el juez Vázquez tuvo en cuenta lo expuesto por el fiscal y consideró “trascendental” la falta de arraigo del imputado. “Si bien su núcleo familiar se encuentra asentado en esta ciudad capital, no puedo desconocer que, al momento de constatar el domicilio denunciado por el imputado, uno de los supuestos cohabitantes del mismo refirió que no vivía efectivamente allí”, resaltó.

En línea con lo planteado por el MPF, el magistrado legalizó la detención del implicado, tuvo por formalizada la investigación penal y dispuso su prisión preventiva por el término de 90 días, al remarcar también que existen, en este momento, “posibles partícipes y/o cómplices aún no identificados”.

Por otra parte, señaló que debía tenerse en cuenta la reiterancia delictiva, que consiste en la imputación en una causa penal en forma coexistente con otros procesos en los que la persona esté imputada. Para el juez de garantías, esa circunstancia quedó “comprobada en esta audiencia, conforme fuera detallado por el Ministerio Publico Fiscal y no controvertido por la defensa”.

Fuente: Ministerio Público Fiscal.