LA NACIÓN / Mariela Arias.-
EL CALAFATE.- Ocurrió en la estancia Moy Aike Chico, campos de la familia Jamieson. El hecho ocurrió a la altura del kilómetro 2555 de la Ruta Nacional 3, donde los propietarios encontraron animales que quedaron sacrificados y despanzados. Estiman que se llevaron cerca de 30 animales y las pérdidas económicas se calculan por lo menos en $ 3.5 millones.
“Cortaron los alambres de ambos lados, de un lado encontramos las panzas de unos catorce animales más o menos, es muy difícil determinar esto, encontramos cuatro animales que habían sido también sacrificados, pues se ve que no les entraron en el móvil que estaban usando y los dejaron despanzados, sin orejas, sin marcas, sin señales, pero con la pintura de la estancia”, detalló el productor Enrique Jamieson, quien a su vez es presidente de la Sociedad Rural de Río Gallegos y presidente de la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz, FIAS.

Los hechos ocurrieron durante el fin de semana largo, la Ruta Nacional 3 atraviesa el campo a lo larga de 10 kilómetros, el alambrado fue cortado a ambos lados de la ruta. “Del otro lado de la ruta a la misma altura, en un cuadro tengo corderas y encontramos a una maneada, viva, se ve que las van agarrando, maniando y después las vienen juntando y a esta se la olvidaron”, detalla Jamieson. Al momento estima que se llevaron 14 borregas que son animales mas grandes y entre 10 y 15 corderos, todo causándale una pérdida económica, de por lo menos $ 3.5 millones.
“Esto es producto de la falta de controles más precisos, y también la falta de colaboración de los municipios, porque en todos los en toda la provincia pasa esto y después esa carne se consume en las ciudades y no hay un control contra esto”, detalla Jamieson que explica la complejidad de poder controlar los 10 km de alambrado que tiene su campo atravesado por una ruta nacional.
Los hechos ocurrieron a 60 km de Río Gallegos y a 30 km del puesto policial de Güer Aike que cuenta con efectivos que controlan las 24 horas los accesos a la capital provincial.

“La verdad que es un perjuicio este enorme, te cuesta avanzar, por un lado las borrega de reposición, las otras son corderas, la verdad que es muy difícil, todo el mundo esté de acuerdo que esto no debería suceder, pero sucede y cada vez con más impunidad”, afirmó Jamieson en diálogo con LA NACION.
Y agrega “hoy me tocó a mí y mañana le tocará al vecino o a otro y va pasando, esto es hasta que como provincia o como argentinos no nos pongamos un poco más firmes en condenar, en controlar”, asegura el productor que ya lleva tres días concretando las denuncias policiales y asegura “y los que hicieron todo esto, si los hubieran agarrado hubieran salido a los dos minutos. Así que bueno, es algo que como como sociedad debemos plantearnos y esto hay que empezar a cambiarlo, porque nos genera mucha impotencia”.-