EL CALAFATE.- El Vicegobernador electo calificó de "deplorable" el estado de las viviendas entregadas por el organismo en las últimas semanas en plena campaña electoral. Dijo que después del 10 de diciembre, "los responsables deberán dar explicaciones en la justicia y rendir cuentas a todos los vecinos de la provincia”
Fabián Leguizamón afirmó que "las casas están sin terminar, desmanteladas y carecen de artefactos", y acompañó fotografías de la unidades habitacionales entregadas en Río Gallegos ubicadas en 1 y 38 cruce bicentenario.
Las viviendas que fueron entregadas durante la campaña electora pertenecen al Programa Reconstruir financiado por el FONAVI y cuyas obras las lleva adelante el IDUV, cuya presidenta es María Grasso, y dependen del Ministerio de Desarrollo Social, Belén García.
Dijo que el Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda (IDUV) a cargo de María Grasso, entregó en los últimos días viviendas que no estarían en condiciones de ser habitadas, "en principio las certificaciones no condicen con la realidad de las obras", aseguró.
Leguizamón manifestó que cuando asuman la gestión el próximo 10 de diciembre, junto al gobernador electo, Claudio Vidal, podrán contar con la documentación necesaria para conocer el real estado de las obras y la inversión que se realizó en las mismas.
“No pueden seguir estafando a nuestros vecinos. Hablamos de cientos de familias perjudicadas directa e indirectamente por una gestión que ha hecho desastres con los fondos de todos”, agregó Leguizamón.
El vicegobernador electo enfatizó, "Iremos hasta las últimas consecuencias para conocer dónde han ido a parar todos los recursos que se dilapidaron en cada obra que no se concluyó como corresponde en Santa Cruz", y prometió que "los responsables deberán dar explicaciones en la justicia y rendir cuentas a todos los vecinos de la provincia”, concluyó.