BUENOS AIRES.- Arrancará el 5 de octubre, dos semanas antes de las elecciones generales. La causa está a cargo del Tribunal Oral Federal 8 y tiene más de 60 testigos previstos. Junto a los ex responsables de la Sedronar serán juzgados el exvicegobernador de Santa Cruz, José Ramón Granero y dos de los hermanos Zacarías, cercanos a la familia Kirchner
Horas antes del comienzo de la feria judicial, el Tribunal Federal 8 finalmente le puso fecha al comienzo del juicio oral donde se juzgará a los máximos responsables de la Sedronar por el tráfico de efedrina, que tuvo su pico entre 2004 y 2008, durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. El debate arrancará el 5 de octubre, dos semanas antes de las elecciones generales. Así lo confirmó hoy el periodista Nicolás Pizzi en el diario Infobae.
Los principales imputados en esa causa son los ex responsables de la Sedronar: Ramón Granero, Gabriel Abboud y Julio De Oure (ex director del Registro Nacional de Precursores Químicos).
Pero también serán juzgados dos de los cuatro hermanos Zacarías, ligados a la familia Kirchner. Uno de ellos, Miguel Angel, era el secretario privado de Granero y tenía decenas de llamados con empresarios que luego fueron condenados por el tráfico de efedrina. El otro, Máximo Rito Zacarías, era un empleado de Ceremonial del PAMI que se presentó ante el Registro de Precursores Químicos para facilitar la compra de 1.000 kilos de efedrina.
En el caso de Miguel Angel, la Justicia tuvo en cuenta que estaba “en un ámbito de gran influencia en los asuntos de la Sedronar”, y que registraba más de cuarenta llamados con el empresario Augusto Abraham, condenado a once años de prisión por el tráfico ilegal de más de 9 toneladas de efedrina.
Aunque ya hubo varios juicios orales por el tráfico de efedrina, esa causa tiene un interés especial porque se trata de los máximos responsables de la Sedronar. Se esperan varios meses de debate porque hay más de 60 testigos.
La causa estuvo a cargo de la jueza federal María Servini, que estuvo cerca de allanar la Casa Rosada cuando el entonces secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, se negaba a dar información sobre las llamadas entrantes y salientes.
Cuando procesó a los máximos responsables de la Sedronar, en 2014, Servini sostuvo que “ningún kilo de efedrina podría haber ingresado legalmente al país sin el conocimiento, consentimiento y autorización” de esos tres funcionarios. La magistrada también determinó que hubo un desvío de 40 mil kilos de efedrina.
El precursor ingresaba al país desde China e India y terminaba en México, donde estaba prohibido.
El “festival” de la efedrina se cortó en septiembre de 2008, apenas un mes después del Triple Crimen de General Rodríguez.
Los ex funcionarios de la Sedronar siempre argumentaron que ellos mismos habían activado las denuncias judiciales contra los empresarios que importaban a la efedrina, pero la Justicia nunca les creyó. Cuando le tocó declarar ante Servini, uno de los ex funcionarios, Gabriel Abboud, aseguró que “no habían existido alertas de desvío internacional ni nacional (de efedrina) hasta abril de 2008″, cuando la Aduana recibió un alerta de la DEA. Y culpó al ex ministro de Seguridad Aníbal Fernández de “retrasar la solución a ese problema”.
El juicio oral podría suspenderse únicamente si todas las partes llegan a un acuerdo con la Fiscalía para realizar un juicio abreviado. “Nadie nos ofreció nada todavía pero no aceptaría un abreviado, yo hice las cosas bien, quiero que se haga el juicio”, ratificó Abboud ante una consulta de Infobae. Y agregó: “En 2014 me agregaron una denuncia por supuesto lavado de dinero ya que “descubrieron” que había adquirido en 2010 una casa y un departamento. La casa era de mis padres y el departamento me lo habían regalado cuando me casé. Después de ocho años de investigación me sobreseyeron en esa causa”.
Granero nunca habló en público del escándalo. Cuando fue procesado, estaba cumpliendo funciones en la ex Enarsa y se retiró en silencio. Las pruebas en su contra se expandieron por otros expedientes. En otro juicio, ante el Tribunal Oral Federal 4, una ex asesora suya, Sandra Oyarzábal, admitió que era pareja de Augusto Abraham, uno de los empresarios condenados por la efedrina.
Otra ex asesora de Granero, Susana Muzzio, que manejó varios de los expedientes administrativos en la Sedronar, había sido empleada de Prefarm, uno de los laboratorios que importó mayor cantidad de efedrina.
La causa contra los ex funcionarios de la Sedronar fue elevada a juicio en diferentes tramos. La primera elevación, en 2017, llevaba la firma del ex juez Sergio Torres. Unos días antes, llamativamente, Servini se había apartado ante una serie de planteos realizados por la defensa de Abboud en Comodoro Py y en el Consejo de la Magistratura. La jueza dijo en ese momento que fue “víctima de hostigamiento”.
Otro de los procesados por esa causa era Ibar Pérez Corradi, pero el TOF 8, presidido por Nicolás Toselli, ya lo condenó en 2018 por el desvío ilegal de 1900 kilogramos de efedrina, entre los años 2004 y 2008.