SANTA CRUZ.- El pago de un bono extraordinario para los estatales provinciales puso en jaque a los intendentes que no pueden costear con fondos propios una compensación económica que ya generó expectativas en los municipales de toda la provincia. Belloni se adelantó anunciando el pago este jueves, luego de que ayer su compañero de fórmula, el intendente Fernando Cotillo adelantara que estaban coordinando con todos los intendentes pagar el bono el mismo día. La misma estrategia planteó Pablo Grasso la semana pasada cuando se reunió con intendentes para abordar la búsqueda de los recursos para el pago del bono. Todos están urgidos por el cronograma electoral y sus propias candidaturas.

Tras el anuncio de la gobernadora, Alicia Kirchner, del pago de un bono extraordinario a los estatales activos y pasivos, de 100 mil y 60 mil pesos para quienes perciban sueldos menores o por encima de los 300 mil pesos, los intendentes encendieron las alarmas advertidos de que el anuncio del beneficio para los trabajadores provinciales tendría un efecto inmediato en los municipales que exigirían igualdad de condiciones.

La semana pasada el intendente de Río Gallegos y candidato a la gobernación, Pablo Grasso, encabezó una reunión con nueve intendentes para tratar el tema del financiamiento del bono extraordinario a los municipales. La idea era actuar en conjunto para unificar una estrategia que fortalezca el pedido de fondos a la provincia, y a su vez coordinar el cumplimiento del pago en una fecha común.

A la fecha aún no está resuelto si la provincia los asistirá con fondos como hace mensualmente con la mayoría de los municipios a excepción de El Calafate que tiene 500 empleados, y si lo hará por la suma total equivalente a lo que el sábado ya comenzó a pagar la provincia.

Otra variante la dio ayer el intendente de Caleta Olivia, Fernando Cotillo, el municipio con la mayor planta de municipales de la provincia -más de 5 mil- cuando garantizó el pago, aunque sin un plan definido. "Podríamos pagar una parte durante los primeros días de agosto para completar la suma de 100 mil y 60 mil pesos a lo largo del año", estimó. El jefe comunal también manifestó que la intención era "hacer un anuncio en conjunto con todos los intendentes".

Lo cierto es que al apuro por cumplir con el pago del bono no solo lo atiza la demanda de los municipales, sino también los tiempos electorales, y sobre todo, el código electoral que establece la prohibición de anuncios que podrían suponer la captación del voto, 25 días antes del acto electoral que en este caso se inicia este miércoles.

De allí la urgencia de Belloni en apurar el pago que puede afrontar con fondos propios y cumplir con los 500 municipales, a quienes va a pagar un solo bono de 100 mil pesos para todos y como extra anunció un aumento de 10% para agosto. Esto último de manera unilateral, sin la concurrencia del gremio.

Mientras tanto Grasso espera no dilatar más el pago para no perderle pisada a Belloni, su competidor interno en la carrera a la gobernación, aunque ya no podrá hacer un anuncio público por impedimento del código electoral que poco importa al empleado municipal que espera el bono "para hacer frente a la inflación", como reza el decreto provincial que lo instituyó.