SANTA CRUZ.- Los cerca de tres millones de guanacos que pueblan la geografía de Santa Cruz asociado a la falta de políticas de preservación y control, están haciendo estragos en la producción ovina cuyos establecimientos se ven obligados a poner candado a sus tranqueras y arrojar la llave junto a décadas de historia de trabajo. El caso de la estancia La Argentina, de la familia Halliday, es un ejemplo de la falta de políticas públicas y sus consecuencias. Crédito portada: Ida Hallidey.

"Los guanacos están ganando la cinchada en la Patagonia... estamos siendo testigos de una verdadera especie en extinción, el productor ganadero", expresaron en su red social facebook, Dolores y Henry Jamieson, con una figura digna de la mejor literatura gauchesca nacional que lamentablemente describe un drama que desde hace al menos una década asola a uno de los pocos sectores productivos de la provincia.

El mensaje fue en apoyo a los propietarios del establecimiento ubicado en paraje Le Marchand, a 200 kilómetros de la capital provincial que no resistió más la agonía producto de la espera interminable de decisiones gubernamentales que nunca llegaron.

La Argentina, "recibió su certificado de defunción, y no logramos de dejar de pensar en su nombre y en su propietario Cristian Halliday, él y su esposa, ambos de familias pioneras, que han trabajado con honradez y sacrificio, dándoles el ejemplo diario a sus hijos", escribieron.

“Somos ovejeros de alma y lo llevamos en la sangre. Mis hijos también quieren continuar con esto porque fue lo que saben hacer de toda la vida. Con solo 18 y 15 aprendieron a esquilar, son los que recorren la manada, van a la manga y me dan una mano para trabajar”, contó al diario la Nación el propietario de La Argentina.

Halliday describió en la misma nota, “Esto es un desierto, imposible tener ninguna producción agropecuaria. Hace 20 años no había zorro colorado, ni pumas, ni guanacos. El problema es que nunca los funcionarios hicieron un manejo sostenible del guanaco dentro del parque", en referencia al Parque Monte León Todo que en el 2004 se convirtió en un área protegida federal.

¿Cuál es la solución?, "Para tener pasto, debería poner alambre de dos metros en un perímetro de 80 kilómetros: totalmente antieconómico”, afirma Halliday.

“No estamos en contra de la fauna y el medio ambiente. Fuimos generaciones que siempre lo hemos respetado. Nunca buscamos extinguirlos y nos hemos mantenido en línea con la fauna de la zona. Pero las políticas de siempre no quieren habilitar la caza comercial y mantener en línea la población de los animales silvestres y esto sobrepasó la situación”, aseguró.

El impacto por el cierre del campo de los Halliday provocó la reacción de la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz que describió el panorama de esta convivencia destructiva entre el guanaco y la oveja.

"La sobrepoblación de guanacos, que se alimentan de una variedad de plantas, incluyendo pastizales y arbustos, han llevado a una disminución significativa de los recursos alimenticios, restringiendo los disponibles para el ganado. Esta competencia por el agua y fundamentalmente por el alimento, ha afectado directamente a la producción ganadera de la región, comprometiendo su aporte a la economía y a la cultura local, hecho del que hemos sido testigo en estos días, a raíz de la viralización de un video donde un productor y su familia debían despedirse de la producción ovina debido al volumen de guanacos en su campo, destino, que si no se toman medidas efectivas, nos alcanzara inexorablemente a todos los productores santacruceños, dejando atrás una actividad generadora de trabajo, arraigo y soberanía en el territorio santacruceño", explicó la entidad que nuclea a los productores de la provincia.

"Santa Cruz es la única provincia con esta magnitud de guanacos por Km2, albergando a más del 50% de las existencias del planeta, y su crecimiento anual no se detiene", expresó la FIAS en un comunicado en el que advierte sobre las consecuencias de la superpoblación de guanacos: " es fundamental reconocer que su expansión y desmanejo, genera efectos perjudiciales en los pastizales, fuentes de agua y seguridad vial", señaló la entidad.

Sostiene FIAS que hay que seguir el ejemplo de Australia con el Canguro, que "con tasas de extracción respaldadas por estudios científicos, han posibilitado conservar la especie y permitir el desarrollo de su ganadería altamente reconocida mundialmente".

La reflexión final de Christian Halliday es un llamado de atención a las autoridades y a la población de Santa Cruz en general: “Obviamente no voy a abandonar porque lo llevó en la sangre. Pero sé que si esto no cambia, va a llegar el momento en que nuestras ovejas se mueran de hambre y yo pueda vivir de esto. Este problema deja sin empleo a mucha gente, sin producción, sin nada”, concluye el productor.