TIERRA DEL FUEGO.- La legislatura votará hoy una declaración de repudio a la decisión de la empresa TABSA de no recibir más pesos argentinos a partir del 16 de junio, y exigir el pago del servicio de cruce del Estrecho de Magallanes en dólares o pesos chilenos. La firma naviera argumenta que las empresas argentinas adeudan montos cercanos a los 2 millones de dólares. Los diputados fueguinos piden además la intervención de la Cancillería ya que dicho cruce es el único paso en actividad que une a la Provincia con el territorio argentino.

La Legislatura provincial aprobará hoy proyecto de Declaración de repudio a la medida adoptada por TABSA (Trasbordadora Austral Broom) la empresa chilena que opera las barcazas que realizan el cruce por Estrecho de Magallanes de dejar de percibir el pago por el servicio en pesos argentinos.

Los argumentos de TABSA para rechazar el cobro en moneda argentina.

Hasta ahora, Tabsa aceptaba pagos en moneda chilena y argentina, además de dólares americanos, euros y tarjetas bancarias.

Pero la difícil situación por la que atraviesa la economía argentina complicó las transacciones en dólares. Según comunicó TABSA “la situación de impagos se origina por una disposición del Banco Central de Argentina, que exige que toda remesa de dólares al extranjero debe ser aprobada por el organismo”.

Añade que “los pagos a Tabsa no han sido liberados, por lo que hoy acumulamos deudas por servicios prestados a transportistas argentinos hace más de un mes por cerca de 2 millones de dólares“.

Embarcación que realiza el cruce entre Punta Delgada y Bahía Azul.

La iniciativa impulsada por el bloque oficialista con el apoyo de las demás bancadas, solicita además la urgente intervención de la Cancillería para que la la firma chilena revierta su decisión, "ya que dicho cruce, por el momento, es el único y tradicional paso en actividad que une a la Provincia con el territorio argentino (sic)”.

Las tarifas por la utilización del servicio de ferry son de U$S 78,6 para vehículos menores hasta los US$ 1.546,7 para camiones con cargas peligrosas.

Los diputados de Tierra del Fuego también reclama al Ejecutivo provincial que “arbitre los medios necesarios a fin de que tomen intervención urgente los representantes del Comité de Integración Austral en relación a la problemática y que se solicite a la empresa Transbordadora Austral Broom que retrotraiga la medida anunciada”.

Los 15 legisladores sostienen que “los fueguinos somos respetuosos de la propiedad privada y de la soberanía de los países” pero afirman que “esos derechos” tienen como límite “el cumplimiento de pacto preexistentes entre ambas naciones”, los que estarían siendo violentados por la decisión de TABSA. Agregan que la empresa “avasalla nuestros derechos como ciudadanos y usuarios del servicio”, hace “prevalecer el fin económico desmedido” y con ello “desvanece todas las acciones proactivas” que Chile y Argentina “realizan para lograr la integración de los países”.

Preocupación de autoridades de Santa Cruz.

Al igual que sus pares de Tierra del Fuego, el diputado provincial, Eloy Echazú, del oficialista Frente de Todos de Santa Cruz impulsa un repudio a la decisión de TABSA, la que calificó de "golpe a la soberanía".

El legislador adelantó que presentó un proyecto "para manifestar nuestra preocupación y repudiar la decisión. A su vez, solicité la urgente intervención del ministro de Relaciones Exteriores, Comercio y Culto Santiago Cafiero para que tome cartas en el asunto y revierta esta intolerable medida", expuso.

Echazú Junto a la ministra de Producción, Comercio e Industria, Silvina Córdoba, se reunió con el cónsul de la República de Chile en Río Gallegos, Christian Blasco Torres, para manifestarle nuestra preocupación por el cobro en dólares del servicio de barcaza que une a Santa Cruz con Tierra del Fuego.

"Durante el encuentro nos comprometimos a coordinar acciones en conjunto con el objetivo de revertir la controversial medida tomada por la empresa chilena Transbordadora Austral Broom", publicó Echazú en su cuenta de facebook.

El Cónsul chileno Christian Blasco Torres, junto a los funcionarios argentinos.

Fuente: El diario del Fin del Mundo.