SANTA CRUZ.- El Fiscal Diego Luciani muestra las llamadas entre José López, Lázaro Báez, Julio Mendoza, entre otras en las que se menciona a Cristina Kirchner, para diseñar "el plan limpien todo". Entre fines de noviembre y primeros días de diciembre de 2015, faltaban pocos días para que el gobierno nacional cambie de manos y Austral Construcciones abandona las obras y justifica su quiebra y el despido de sus empleados. Báez cobró hasta el último peso antes del cambio de mando del gobierno nacional, sin embargo luego culpó a Mauricio Macri por el cierre de su constructora. Raúl Santibañez presidente de Vialidad Provincial fue quien autorizó el pago de 537 millones de pesos a Báez.
Las pruebas mostradas ahora por el fiscal Luciani, evidencian cómo Lázaro Báez cobró hasta el último peso para despedir a sus 2500 empleados durante los primeros días de 2016.
En su exposición, el fiscal también mostró la documentación que acredita pagos anticipados a Austral Construcciones por U$S 1.000 millones.
"¿Dónde fue a parar toda esa plata?" se preguntó el fiscal, tras lo cual detalló "la aglomeración de Estancias que compró Lázaro Báez", y la cantidad de inmuebles, "238 adquiridos en Santa Cruz", sobre un total de 293 inmuebles y concluyó: "Ahí está la plata", enfatizó.
"415 mil hectáreas solo en la provincia de Santa Cruz", remarcó Luciani, y comparó que esa superficie adquirida "por el monotributista Báez" es equivalente a veinte ciudades de Buenos Aires.
Raúl Santibañez presidente de Vialidad Provincial fue quien en noviembre de 2015 autorizó el pago de 537 millones de pesos a Báez. 400 millones por el pavimento de la ruta La Julia-Tres Lagos.
Por esos días, el dueño de Austral Construcciones culpó al gobierno de Macri de "haberle cortado los pagos", para de ese modo, justificar la quiebra de la Constructora y el despido de 2500 trabajadores luego de varias semanas de convulsión social por las protestas de los obreros.
El vuelo rasante del "Potro" Velázquez, en el aeropuerto de Río Gallegos, en los alegatos como muestra del último viaje del Tango 01 a Santa Cruz con la entonces presidenta Cristina Fernández en sus últimas horas de mandato.