Por Mariela Arias / La Nación EL CALAFATE.- Los hoteleros, los guías de turismo, los remiseros, los mozos, los cocineros, las mucamas, los vendedores de cervezas artesanales, de chocolates y de suvenires. Todos aquí necesitan que la actividad turística se reinicie con urgencia. Habrá promociones en hoteles y restaurantes para el turismo interno, pero antes será necesario que la gobernadora Alicia Kirchner abra la circulación en las rutas y habilite la hotelería, y que la Nación habilite el ingreso al Parque Nacional Los Glaciares. Como en otros destinos turísticos internacionales, el Covid-19 llegó temprano aquí, lo que generó un corte abrupto de lo que prometía ser una temporada histórica. El 17 de marzo llegó el cierre y, con turistas aún aquí, llegaron los primeros casos. La cuarentena fue muy estricta: el miedo vació las calles. A eso se sumó que los casos locales fueron trabajadores del turismo y del hospital. Tras ese shock inicial y con 34 casos en la ciudad, el final fue feliz. Todos se recuperaron. Tras 65 días sin contagios, la mayor incógnita aquí es el futuro económico de una ciudad que depende netamente del turismo. "En febrero empezamos a recibir bajas en las reservas. En materia gastronómica, si bien hubo apertura a nivel local, muchos abrieron y cerraron, otros hacen delivery. Estamos trabajando con una facturación del 15 al 20% de la misma época de la temporada anterior", afirmó Adolfo Jansma, presidente de la Cámara de Comercio local, que reúne a la mayoría de los rubros turísticos. Cuando empezó la cuarentena bajaron las reuniones y aumentó la preocupación por el futuro. Con una ciudad sin contagios, hoy la urgencia está en saber cuándo empieza la temporada, cuándo los vuelos, cuándo llegarán las reservas para la temporada que históricamente se abre en octubre. Y nadie lo sabe. Desde el Ente Mixto -una entidad que nuclea al municipio y los empresarios- lanzarán una promoción destinada por ahora al turismo de Santa Cruz, donde se promoverán precios rebajados en hoteles y en restaurantes y acondicionarán el tradicional camión de promoción turística para recorrer, por ahora, el interior provincial. Jansma cree que la apertura del turismo interno no tendrá un gran impacto. "Somos un destino turístico que depende de los vuelos y de rutas nacionales que hasta ahora se encuentran cerradas y con una perspectiva de no abrirse en un tiempo cercano", dice. Y cree que la situación económica de la provincia no es la mejor para lograr que se vuelque turismo hacia El Calafate. Riesgo de cierres Un estudio realizado por la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra) reveló que, de mantenerse la cuarentena, siete de cada diez establecimientos hoteleros o económicos deberán cerrar sus puertas en la Argentina por el impacto del Covid-19. Y a la mayor parte podría ocurrirle en los próximos tres meses. "No escapamos a todo lo que está pasando en otros destinos turísticos del país. Se tienen que tomar medidas urgentes. Estamos reclamando una ley de emergencia nacional para el sector turístico en todo el país para tratar de frenar el quiebre diario de las empresas", afirmó Jansma. Por su parte, el secretario de Turismo Oscar Souto, señaló que se promueven acciones para sostener al sector turístico. "Todos los comerciantes que ya pagaron las habilitaciones comerciales por adelantado recibirán crédito fiscal para el 2021 por los meses que no hayan podido trabajar, en tanto que el municipio no cobrará interés a quienes adeuden deudas municipales y cobren menos de $ 40.000 de sueldo", detalló. A este paquete se suma una subvención del Ente Mixto sobre las tasas de interés del 24% de aquellos comercios que hayan sacado un crédito para pagar sueldos. Mientras tanto, en otros seis municipios de la provincia lanzaron un nuevo corredor turístico que no incluye el Glaciar Perito Moreno denominado "una nueva Alianza Estratégica Turística" que intentar promover con descuentos el turismo postpandemia en la provincia. La idea es generar esquemas de descuentos, promociones y posibilidades para visitar Río Gallegos, Río Turbio, Piedrabuena, Gobernador Gregores, Los Antiguos, Puerto Deseado y Puerto Santa Cruz. Mientras Santa Cruz intenta reactivar, en Tierra del Fuego, luego de más de tres meses de suspensión de la actividad turística, se habilitó el turismo interno y el transporte interurbano. Hoteles, restaurantes y confiterías extendieron el horario hasta las 2 de la madrugada, aunque por el momento solo para el turismo provincial. El transporte privado de pasajeros también fue autorizado a partir de ayer, siempre y cuando cada empresa cumpla con un protocolo que incluya el distanciamiento social y medidas de limpieza e higiene entre cada viaje. De este modo los habitantes de Ushuaia, Río Grande y Tolhuin podrán planificar visitas turísticas dentro de la provincia de la Patagonia donde el coronavirus impactó más fuerte, con 136 personas contagiadas y una persona fallecida. Desde hace 29 días la provincia no registra casos de Covid-19. El gobierno mantiene habilitada la producción industrial y el comercio, y permite las reuniones familiares de hasta diez personas durante los fines de semana.