Santa Cruz.- Un hermano de Jesica Minaglia, la docente asesinada el miércoles en su domicilio en Comandante Luis Piedra Buena, se presentará como querellante en la causa que investiga el femicidio de la maestra. Mientras tanto su expareja continúa detenido, y ya se tomaron los primeros testimonios a miembros del círculo de allegados a la pareja.
Peritos de la policía provincial continúan hoy con la tarea de recolección de pruebas para esclarecer el femicidio de la docente Natalia Magalí Minaglia, cometido el miércoles último en la localidad de Comandante Luis Piedrabuena, informaron fuentes de la investigación.
Un hermano de la docente asesinada se presentará como querellante en la causa. El joven reside en la provincia de La Pampa donde se desempeña en la fuerza policial.
El mediodía del miércoles 15 de abril, la docente Jesica Minaglia, fue hallada muerta en su domicilio con un fuerte golpe en la cabeza y en medio de un charco de sangre.
Fue su madre, la primera en arribar al lugar y encontrarse con la escena del crimen. Había acudido a pedido de su yerno, Pablo Núñez, quien le comentó que Jesica no respondía los llamados. .
Núñez es el único detenido en la Comisaría 1ra de la localidad, en la causa a cargo de la jueza de Instrucción de Puerto Santa Cruz, Noelia Ursino quien aplicó el protocolo de Femecidio para encarar la investigación.
Se conoce que hasta el momento prestaron declaración el hermano de Pablo Núñez, una amiga de Jesica, y un joven también conocido de la víctima.
En tanto, los investigadores realizaron allanamientos en la casa del detenido y en las de sus familiares por orden de la magistrada.
Ayer a las 11 se realizó el sepelio de la docente, el que fue acompañado por una numerosa cantidad de amigos y vecinos desde sus automóviles en virtud de las normativas de distanciamiento social impuesta en el marco de la pandemia por el coronavirus.
La autopsia, realizada el jueves en Río Gallegos por el médico forense de la justicia, dio como resultado que la muerte se produjo por un traumatismo encéfalo craneano.
Desde el jueves, personal especializado en tecnología escanea teléfonos celulares y cámaras de seguridad, en tanto hoy los peritos de la policía provincial sumaron canes rastreadores.
Los sabuesos siguen las huellas de sangre encontradas en el lugar, dentro y fuera de la vivienda que ocupada Jesica junto a su pareja de quien estaba separada desde hacía al menos tres semanas, según testigos que conocían a la maestra.
Fuentes de la investigación informaron a Télam que los teléfonos son peritados por personal policial que viajó especialmente de la capital provincial a Comandante Luis Piedrabuena.
Núñez, con quien la mujer asesinada tuvo una relación de varios años con un hijo en común de tres años, fue la última persona que la habría visto con vida.
Mientras tanto colegas docentes de Jesica Minaglia, y miembros de colectivos feministas, realizaron un "ruidazo", pidiendo que la justicia actúe con eficiencia y premura para que el caso no quede impune.